viernes, agosto 12, 2011

Tortilla a la luz de la luna


                   
Tortilla a la luz de la luna

 Resultó ser una tarde- noche perfecta, en un lugar perfecto, en el momento perfecto, ya es difícil.


 Algo tan sencillo para romper la rutina, fue perderme en un paisaje de pinares, cerca de la sierra de Madrid, próximo a Robledo de Chavela, en el pueblo de Valdemaqueda, con el río Cofio bajo el puente romano, escapando en cascadas entre piedras y bañando nuestros pies. Cuando la luz del día se adormece, sólo nos protege el palio plata de la luna. Es el momento de coronar las sensaciones plenas sacando el contenido de la mochila y disfrutar con mis amigos Marisol, Manolo, Mariano, Paquita y por supuesto Chencho, el hornazo, la tortilla, cervezas y melón.

Ante noticias grises y negras (que calientan el verano) de bolsa y mercados, de recesión y aceleración, de rescates y primas de riesgo, de crisis y más crisis, guardo este capital para las noches en que el sueño levanta las sábanas y sale de mi cama.