Querido mar:
Construiste para mí
sobre el cristal del ensueño
torres de espumas y versos,
prismas de sal y poemas
que quiero llevar conmigo
en un regreso imposible,
un regreso sin adiós,
apretados muy adentro.
Cuando las sombras se alarguen
y abra sus ojos la noche
yo escucharé tus bramidos
tú escucharás mi silencio,
cruzaremos las miradas
en triángulo perfecto.
El ensueño cobra vida
en las brisas que sentimos
y los ojos que nos miran.
Deseará vivirte así
a tener que imaginarte,
tu Aguamarina.
3 comentarios:
Espero que además del mar nos leves en el bolso a los marineros que quedamos a la orilla. Besitos. Buen verano.
Hola, Mariadolcas, me asomo por tu página (creo que por primera vez). Me estaba ahogando con tus versos cuando ví mi mar, mis playas y mis olas. Aquí no me ahogaré. No me he resistido a saludarte.
Volveré.
Gracias Mcobo por acercarte a este mar que me trae tu saludo. Las olas te llevarán el mío. Hasta que quieras "ahogarte" otra vez.
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