lunes, febrero 11, 2008

La piel de África


Al llegar a Erfoud nos están esperando los coches 4x4 que nos llevan hasta el desierto para contemplar la puesta de sol en las dunas de Merzouga. Nos dividimos en grupos de seis en cada coche y recorremos una distancia de 50 km. por una extensión al principio de piedra y escasa vegetación, luego la pista queda invadida por la arena. No hay rutas marcadas, cada conductor va por donde quiere, parece un raily del Dakar, que rivalizan en ver quién llega antes, mientras las ruedas patinan en la arena. Allí nos espera una caravana de camellos porque parte del grupo hacen la travesía en camello, el resto la hacemos a pie hundiéndonos en la arena. Es maravillosa la experiencia.
El paisaje baña los sentidos, emociona el momento en que los pinceles del sol pintan de dorados y sombras los perfiles de las dunas en la piel de África, dibujando los senos, el vientre y las caderas de un cuerpo que se estira, se mueve, se ensancha y despereza cuando el viento lo acaricia. Son las espectaculares dunas de erg Chebbi, tienen vida y 150m. de altura.

1 comentario:

Maypi dijo...

No existe mejor cultura que la que te proporcionan los viajes. ¡¡Que suerte la de poder disfrutar de ese espectáculo para la vista!! Un texto muy plástico, con una gran paleta de colores.
¡¡Hasta el jueves!!