Este poema de José Hierro es un deseo arrebatado de llenar el mundo de primavera con su vida en el último suspiro. Siempre me impresionó su fuerza y a la vez su dulce frescura.Canción de Primavera
Hojitas de oro tierno,
primaverales zumos,
¡Cuánta flor amarilla!
¡Qué verde, limpio y húmedo!
¡Qué divino expresarse
con cantos, aguas, juncos,
brisas, soles, orillas,
aves, nubes, crepúsculos....!
Se tornaría negra
la mañana; desnudos
los árboles; los vientos
ya para siempre mudos;
tendría yo cerrados
los ojos, y mi último
latido, mi alegría
primaveral, mi mundo
sometido a la sombra
estallaría en surcos,
se rompería en soles,
ardería en capullos.
Abriría la tierra
con su poder oscuro.
Mi vida llenaría
de primavera el mundo.
3 comentarios:
Tan bonita la poesía como la estación. Todo es de color, como en la canción. Los azules, verdes y amarillos, compitiendo por ver quien da mas brillo a la naturaleza (...por cierto, esa montaña me suena).
Una explosión de exuberancia.
¿Quien da mas?
El León multicolor se viste de primavera,¡no me lo puedo creer!Cualquier año te hacen una falla en Valencia.Puede ser que conozcas esa zona de los Pirineos, es el Posets con 3.370 mt. de altitud, cerca de Benasque en Huesca. Una maravilla para contemplar en primavera, más que en invierno.
Preciosos amarillos llenos de vida... que disfruto.
Tu blog se viste de primavera y nueva vida como todos los días de tu vida...
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